sábado, 27 de marzo de 2010

Esclavas andaluzas en África


Me resulta difícil expresar por escrito lo vivido durante 38 años en este mundo africano. Al terminar la formación de A.T.S. me ofrecí conociendo la necesidad de una enfermera en esta Misión de Bikop. Vine a los 26 años, en el año 1971 y hasta el año 1990 que vino la primera Esclava médico estuve de responsable del Dispensario

En 1992 marché a Kinshasa 9 años, los 6 primeros de formadora, años de guerra, asaltos, disturbios políticos, violencia y riesgo, en ese contexto de inseguridad me confió la Congregación la formación de nuestra primeras Esclavas africanas.

En el año 2001 volví de nuevo a Bikop, donde trabajo en el Dispensario, ya gracias a Dios tenemos Esclavas médicos y no soy la responsable, yo me ocupo sobretodo del acompañamiento de los enfermos de SIDA, un campo también delicado y para mi sagrado, personas completamente rotas en su historia, en su imagen, que sufren el desprecio, el miedo a la muerte, el abandono con frecuencia de la familia…

En estos contextos, completamente diferentes, como enfermera, al frente de un Dispensario en la selva, con personal nativo, que sabia aun menos que yo, o como formadora o ahora con los enfermos de Sida, los sentimientos son muy parecidos.

IMPOTENCIA, INSEGURIDA, POBREZA PERSONAL…..

Y esto precisamente ha sido mi experiencia espiritual más fuerte, pues me ha ayudado a vivirlo como GRACIA, como REGALO…EUCARISTIA

GRACIA de aceptar con paz y CONFIANZA una misión que me supera….
GRACIA, relativizar y vivir con serenidad las dificultades y conflictos
GRACIA, acoger la vida de cada día, la propia y la ajena, tal como es, con sus alegrías y limitaciones, la realidad tal como viene, tal como es, rota, violenta, pobre, y presentarla al Señor, dador de VIDA, que me llena de esperanza, ilusión, entusiasmo
GRACIA, desear ser testigo de verdad, en un mundo de corrupción, de engaño; de simplicidad y sencillez en este mundo de apariencias y prestigio; de gratuidad en un mundo de intereses.
GRACIA, experimentar la pobreza, la impotencia y “saber” que el Señor no abandona la obra de sus manos. Reconocer mis fallos, equivocaciones y torpezas, con paz, sencillez y sin complejos. Y sentir “ No temas, yo estoy contigo, yo te he elegido…”
GRACIA, es para mi vivir en AFRICA, este pueblo, los pobres, me han evangelizado y me han ayudado a vivir mi vocación de Esclava. Vivir aquí me ha ayudado a descubrir lo ESENCIAL, que pocas cosa son necesarias, a no crearme necesidades, que lo importante es SER y no hacer, a vivir sencillamente, a esperar…. A saber gozar con lo sencillo, con lo pequeño de cada día, la sonrisa de un niño, un enfermo de Sida que va recuperando fuerzas, esperanza, ganas de vivir, la belleza de esta naturaleza….


GRACIA es ahora trabajar con los enfermos de SIDA, los mas pobres y despreciados de esta sociedad, escucharles, animarles, devolverles su dignidad…las ganas de vivir, luchar por la vida….

Durante todos estos años me ha ayudado mucho la vida de Rafaela Mª, colegiala de Córdoba y mi vocación la sentí en Pedro-Abad, en la Capilla de la Santa. Me atraía esa mujer dulce, sencilla y humilde a la que el Señor me llamaba a imitar.

Siempre la he tenido muy presente, y en todos los momentos difíciles, el rezar con sus cartas, con su vida ha sido una dócil fuerte de confianza, de fortaleza…en los años de guerra en el Congo, con tantas dificultades, sentía la convicción profunda, de que esa fundación en el corazón de África, era obra del Corazón de Cristo y el la sacaría adelante.

Ella me ha enseñado a tener un corazón sin fronteras, UNIVERSAL COMO LA IGLESIA, Ya tenemos su imagen en el Centro de la cristiandad, Rafaela Mª sigue mirando con amor a todos los hijos de Dios, convocados de todo el mundo. Dejemos resonar en nosotras sus palabras que nos hablan de fronteras rotas, de corazón abierto de fraternidad universal. (Pregón, I Yáñez)
¡Cuántos hijos tiene Dios! Viendo mundo se aviva el celo”
Para mi es GRACIA vivir en África, es un REGALAZO que me ha hecho la Congregación. GRACIAS DE TODO CORAZÓN.


Aurelia Serrano